Vaya por delante que escribo en mi calidad de madre de 4 hijos, ocupada y preocupada por nuestra educación de hoy y por la de mañana. No soy ninguna experta, sólo soy una aprendiz de todo y maestra de nada que se dedica profesionalmente a la innovación y al talento.
Puristas y excelsos teóricos pueden dejar de leer, no van a encontrar en este post mucha ciencia, si bien en mi modesta opinión, la educación como la innovación y la ciencia, tienen una buena parte de prueba y error…
Puesta la venda previa a la herida, vamos a ello! ¿Innovamos en educación?
La inquietud y la sensibilización social por la educación es evidente hoy, pero ¿Son nuevas?. Se leen y oyen aseveraciones del tipo «sólo la educación puede resolver ….», pero esto ya lo decían Pitágoras » Educad a los niños y no será necesario castigar a los hombres « , Confucio » Donde hay educación no hay distinción de clases» o Platón » El más importante y y principal negocio público es la educación de la juventud».
Ergo no tenemos un nuevo problema, «sólo» convivimos en un nuevo contexto al que adaptarnos o contra el que revelarnos, según la actitud elegida. Por mi parte, prefiero como Iosu Lazcoz mi compi de blog, la actitud positiva.
Lo realmente complicado es que nos educamos (sí, sí, he dicho bien, NOS educamos a cualquier edad) para otro contexto distinto, que desconocemos, a pesar de muy loables intentos de prospectiva y previsión de futuro.
En este Siglo XXI que lidiamos aquí y ahora, parece demostrado que el conocimiento y la interacción son infinitamente más accesibles que hace tan sólo 20 años. Las redes sociales virtuales suponen canales de comunicación y creación colectiva inexistentes ayer. Los usuarios de estas redes tienen además predisposición para divulgar y compartir, incluso en ámbitos atípicos hasta hace poco para la colaboración como la Administración. Dos buenos mimbres a añadir al cesto de la innovación en la educación: instrumentos útiles (cuidado con convertir las TIC en fines y no en instrumentos) y actitudes proactivas y colaborativas.
En el plano social, nuestros esfuerzos por mejorar la educación se pueden encauzar a través de múltiples foros organizados que recopilan, analizan, debaten y proponen cambios estructurales. Son también escaparates de ejemplos prácticos que se pueden adaptar a distintas realidades y culturas. Cito aquellos de los que más me nutro, impulsados por la sociedad civil, y con una visión de la Educación a lo largo de la vida y no sólo de la infancia y la juventud: Agora Talentia , Transforma Talento , TED Educación…Tres mimbres más: foco compartido, implicación e intercambio a la saca!
Tenemos los mimbres. Entre todos (legisladores, gestores, profes, medios de comunicación, empresas y familias) debemos tejerlos con visión de largo plazo sabiendo que hoy construimos el mañana de niños, jóvenes y adultos. Y como los cestos a mí me gustan con frutos, voy a terminar con ejemplos que conozco y que funcionan haciendo buena la premisa de este blog » Las cosas las hacen las personas»:
- Ejemplo probado del modelo de inteligencias múltiples
- Ejemplos de formación de las familias: Escuelas de padres y madres de Tamaulipas, Universidad de Padres, Escuelas de Familia
- Ejemplos de formación en instituciones y empresas, Universidades Corporativas
Y ahora decidan ustedes ¿Innovamos en educación?. Personalmente, me decanto por implicarme prioritariamente en lo que considero el sustrato (valores, emociones, relaciones…), pero eso es materia para otro post.