Sin entrar a valorar si las tendencias que se publican nos complacen o no, hay segmentos y comportamientos que están en auge. Algunas serán más influyentes que otras y no todas nos afectarán igual. En cualquier caso, no nos podemos permitir cerrar los ojos a lo que pasa a nuestro alrededor si queremos encontrar oportunidades de innovación. Echa un vistazo a algunos nuevos hábitos que pueden ser útiles:
El mundo cambia. Siempre lo ha hecho
• Las tallas grandes y el concepto “diversidad en los cuerpos” despuntan frente a las tallas XS que venían impuestas.
• Las “madres modernas” quieren artículos de lujo y de diseño, para ellas y para sus bebés.
• Surgen gran número de herramientas y aplicaciones para que creemos aquello que necesitamos: webs, apps y diseños a nuestro gusto.
• Los espejos digitalizados permiten simular el color de lo que nos probamos, aportan información sobre precios y origen, y hasta sugieren modelos más adecuados en función de nuestra fisionomía.
• De las tiendas a los Hubs; supermercados temáticos en que además de comprar, se puede hacer networking en espacios que invitan a quedarse.
• Lo digital y lo virtual entran en las tiendas físicas. Pantallas que hacen de show room, entretienen a los niños o te permiten diseñar la decoración de tu salón en el acto.
• Ya no hay que hacer cola. Realizas el pedido por la app y te levantas sólo cuando está listo.
• Las encuestas de satisfacción pasan a mejor vida cuando una app o una pantalla te permiten dar feedback sobre la marcha mientras te diviertes.
• La ropa inteligente sigue evolucionando: nano, sensores y robótica están a la orden del día.
• De lo dulce a los salado; helados de verduras, palomitas de queso, galletas con sabor a pollo frito, snacks de algas.
• El crowdfunding sigue imparable; deporte, prensa, app, películas, libros y aventuras imposibles reciben microdonaciones.
• Comer y cenar en casa, de la mano de los chefs. Del pedido de un plato, al del menú completo para invitar a amigos y disfrutar con ellos en casa.
• Ciencia, tecnología, ingeniería y mates, para niñas. Kits, libros, juegos y por supuesto programas informáticos.
• Del poseer al utilizar. El concepto de compartir y colaborar se extiende y genera nuevos modelos de negocio, que implican desintermediación.
• Los centros educativos ya no serán sillas y pizarra. La corriente de espacios abiertos y tecnológicos que hemos visto en las empresas, llega a los colegios.
• Coches, carretillas elevadoras, drones.. “autónomo” es un término que ya no es sólo para profesionales que trabajan por cuenta propia.
NUEVOS CANALES. NUEVAS EXPERIENCIAS
El canal estrella es sin duda el móvil que está cambiando nuestros hábitos paulatinamente y es según algunos científicos, tan adictivo como la cocaína. Algunos comportamientos que vas a tener que observar si quieres innovar con éxito en tus canales de comunicación con los clientes (1 ):
• Nuestro estilo de vida es conectado: uno de cada dos estamos en más de una red social y 4 de cada 5 participamos en la economía colaborativa. Bla bla car, Uber, …
• Más visuales que lectores; el 46% de los jóvenes pasan más de una hora al día en youtube.
• La inteligencia artificial supera a las “pantallas”. Los objetos actúan por sí mismos sin necesidad de recibir órdenes desde el teléfono. El cortacéspedes detecta que la hierba ha crecido y se pone a trabajar, las luces de casa se apagan solas cuando nos vamos a la cama.
• Lo virtual se hace real. Queremos realidad aumentada para ver deportes, hacernos selfies en 3D y un 44% declaramos querer imprimir nuestra propia comida.
• Sensorizando para detectar problemas. Hasta los ladrillos nos pueden informar sobre posibles fallos en nuestra casa.
• Las emergencias, mejor a través de un chat o de una app que nos indique lo que sucede y lo que hay que hacer de manera inmediata.
• La mitad de los usuarios de Smart phones espera monitorizar su salud a través de ellos.
• Ciudadanos «periodistas» e influyentes. Más de un tercio consideramos más efectivo denunciar la corrupción de una empresa en las redes, que ir a la policía.
¿ Y AHORA QUÉ?
Ya conoces las cinco conductas del innovador disruptivo:
Observar, Cuestionarse, Experimentar, Asociar y Conectar.
Esperamos que estas pinceladas y las que seguiremos publicando te permitan mantenerte alerta y en marcha.
¡A tu disposición para debatirlas!