Que la innovación es algo necesario, diría que imprescindible, para que los negocios sobrevivan es ya un clásico sobre el que no voy a incidir y menos en este blog donde ya todos estamos convencidos. Pero como lo nuestro no es solo decir que la innovación es importante sino hacer que suceda y las cosas las hacen las personas…
Me gustaría hablar de una formación poco conocida pero cada vez más habitual en nuestro entorno. Se trata de una formación miscelánea que te enseña todo aquello que puedes necesitar saber en cualquier ámbito de la vida. Además te prepara para enfrentarte a cualquier situación y salir vencedor y fortalecido. Se trata del máster en todología. Lo curioso es que nadie sabe donde lo imparten o qué duración tiene, pero es efectivo al 100%. En algunos casos se entrena desde la cuna y se va sofisticando durante la maduración de la persona. En otros casos es exprés y suele ir acompañado de un nombramiento concreto. Se trata de un fenómeno complejo de explicar, es como si con el cargo, la persona quedara imbuida de todo el conocimiento que el puesto requiere y más.
Pues bien, el licenciado en todología o todólogo es un individuo afortunado porque como tiene una formación tan prodigiosa, ya lo sabe todo. No necesita preguntar a nadie y por lo tanto es el mejor a la hora de tomar decisiones porque se basta a sí mismo. En las reuniones sociales gusta de dar consejos a todos los presentes sobre como deberían haber hecho las cosas. Esto los hace un poco molestos, pero créanme no es más que pura envidia. Es que no todos han tenido la suerte de cursar todología.
Estos afortunados individuos que todo lo saben y todo lo entienden no necesitan ideas porque ellos ya las tienen todas. Son el rey sol de la innovación, la innovación son ellos. Así que ¿Para qué preguntar a otros? Sería impensable que tuvieran una idea que ellos no hubieran tenido antes. Y si la tuvieran y se la hicieran llegar, evidentemente sería una idea defectuosa o imposible.
Por todo ello suele suceder que si el cabeza de una organización es un todólogo, una vez agotadas las ideas que él pueda tener y decida poner en práctica, se acabó la innovación. Si miro a mi alrededor identifico a algunos y veo que es un fenómeno creciente y me pregunto ¿Me estaré todologizando yo también? Si hago examen de conciencia, todos vamos un poco sobrados por la vida, ¿no? Sin embargo, leía hace poco un artículo de Harvard Business Review sobre un estudio de J.Collins: level 5 leadership. En él, partiendo del estudio de 1500 empresas y centrándose en aquellas con unos resultados sostenidos de siete veces la media, buscaban la razón de tan estupendo comportamiento y ¿saben? para su sorpresa, esta era que estaban lideradas por personas humildes y a la vez ferozmente resueltas. Según este estudio podríamos decir que la todología entorpece la buena marcha de la empresa y la verdad es que miro a mí alrededor y a mí el patrón me cuadra.
Así que, con su permiso, voy a terminar pidiendo a todos mis amigos que si me ven un poco todóloga me den una colleja y me recuerden a Jim Collins. No me gustaría nunca convertirme en un freno de la prosperidad de la empresa en la que trabaje.
Me ha encantado este post! La verdad es que conozco a unos cuantos todólogos y, sí, pueden llegar a ser realmente molestos. Me quedo con que la humildad es una virtud clave para ejercer el liderazgo.
Un saludo!
Mucha humildad, mucha capacidad de trabajo, mucha paciencia y si la Pyme, es tuya, Mucha todologia,
De no ser así. Quiebra.
Un saludo.
Jope, me ha gustado un montón esta reflexión; y como yo ya tengo mis treinta añitos de experiencia en empresas gordas, me imagino que puedo manifestaros que si: soy un «todologo» confeso e impenitente…..prometo reformarme…
Un abrazote!
Cuan dificil se le hace a aquel que siente que: «despues de el nada», y por tanto desconfia en las habilidades de los demás, el aceptar los puntos de vista dispares o simplemente que «no le suenan bien»…la arrogancia es mala consejera… Blen, has acertado en tus apreciaciones, que aunque te parezca de perogrullo, tambien se plantearon en estos lares…pero aui en Latinoamérica (estoy en Perú), donde la labor caudillista esta presente en cada paso que damos, pues esto es pan de cada día y lucha diaria con estos personajilos… muy buen punto de vista…
Me ha divertido mucho el post, especialmente el término «TODOLOGÍA», ja ja ja!
La humildad y el talento tienen escaso reconocimiento en estos tiempos, en los que parece que la mediocridad es un valor promocionado por televisión e instituciones. Pese a ello, el trabajo intenso, honesto, constante, discreto y generoso con los demás prevalecerá a largo plazo. Así debería ser.
¡Un saludo!